El masaje es una de las técnicas más antiguas para la mejora de diferentes dolencias.
Siempre será realizado por uno de nuestros especialistas y este escogerá el mejor tipo de masaje en función de tus necesidades.
Las mujeres embarazadas y personas con ciertas enfermedades deben tener especial cuidado a la hora de recibir estos tratamientos por lo que siempre es aconsejable consultar antes con nuestros especialistas.
Este tipo de masaje será una ayuda extra en el tratamiento de trastornos neuromusculares y musculoesqueléticos que puedas sufrir.
Además te ayudará a aliviar el estrés y eliminar toxinas, activando la circulación sanguínea y linfática y mejorando el aporte de oxígeno a los tejidos.
Regálate un masaje relajante y olvídate de las rutinas diarias. Te ayudaremos a desconectar del exterior mediante la relajación de los músculos con movimientos suaves. Conseguirás aflojar poco a poco tu musculatura y relajar la mente.
Además, con el masaje, aumentaremos la producción de endorfinas y con ello notarás como el estrés y la tensión van desapareciendo.
El masaje reductor te ayudará a reducir la grasa localizada no deseada y estilizar el contorno de la figura.
Con movimientos rápidos y fuertes que se centran en la zona del cuerpo donde se acumula la grasa, se genera un calor que contribuye a disolver el tejido adiposo. Los movimientos y técnicas que se utilizan sirven asimismo para mejorar la circulación sanguínea e incrementar el consumo calórico gracias al incremento de la actividad motora.
El masaje drenaje te ayudará a eliminar líquidos y toxinas y a mantener en forma tu sistema inmunitario.
Está indicado para personas con problemas circulatorios, obesidad, cansancio en las piernas, etc.